Seguidores

lunes, 19 de diciembre de 2011

Tal cual.

Hoy lo único que pasa por mi cabeza es lo fácil que puede una persona irse de tu vida, lo fácil que entra, por unas cosas o por otras, por casualidades o por cosas en común llega, y se va convirtiendo en alguien que tu crees que merece la pena, que crees que puede llegar a formar parte de tu círculo, de tu sentimiento más valorado llamado amistado, llamándolo amigo. Pero un día te das cuenta de que no fue así, que lo que considerabas el prólogo a la historia de vuestra amistad no era más que una farsa. Hoy me he dado cuenta de que las personas inmaduras cuando no tienen lo que quieren, un rollo, un polvo o lo que sea pasan, van en busca de otra "presa" a la que hacer pensar que puedes contar con ellos, que sí te regalará los oídos creyendo que al fin has encontrado a ese amigo que tanto buscabas y en cuanto no consigan eso, irán pereciendo hasta que ya... seas un recuerdo borroso en un simple capítulo de sus vidas.


No hay comentarios:

Publicar un comentario